Luego de una larga exposicion al sol es imprescindible rehabilitar nuestra piel. A continuacion te daremos algunos consejos para retomar su estado natural:
- El primer paso es tomar abundante agua, pues una exposicion intensa al sol produce deshidratacion. Uno de los principales daños que causa el sol intenso, es la rapida evaporacion del agua presente en sus tejidos, a lo cual se suma el liquido perdido con la transpiracion. Reponer las reservas de agua es basico para que el cuerpo recupere su equilibrio hidroelectrolito. Si al margen de la sed y la inflamacion de la piel hay dolor de cabeza, puede tomar un analgesico simple, si las molestias son mas complejas, como quemaduras extensas, desorientacion, fiebre y nauseas podrian requerir atencion medica.
- El siguiente paso es refrescar la piel. El calor acumulado durante el dia se libera con ayuda de un baño fresco o de compresas humedas ligeramente frias, pero jamas con la aplicacion de hielo directamente sobre la piel: si bien el hielo ayudaria a reducir la temperatura rapidamente, puede complicar las quemaduras, en este caso por frio extremo.
- El uso de gel de sabila es altamente recomendado para aliviar la inflamacion: basta con abrir a lo largo una penca y recolectar el cristal gelatinoso que contiene para triturarlo y aplicarlo sobre la piel.
- Una vez que la hinchazon comienze a ceder, el uso continuo de cremas hidratantes contribuira en la regeracion natural de la piel. Es fundamental no exponerse al sol en los dias siguientes.
- Una vez que comienze el despellejamiento, no es recomendable desprender estas pequeñas escamas con las uñas, por tentador que resulte. La epidermis tiende a soltar por cuenta propia estas celulas muertas una vez que sus tejidos se han regenerado, y hacerlo antes de tiempo puede provocar hipersensibilidad e incluso dolor en las zonas expuestas, asi como la aparicion de manchas si el area no se protege al maximo de nuevas exposiciones al sol.
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